Luciano, el jefe de Cadenza, el que parte la pana en Ibiza desde hace, por lo menos dos veranos, en su centro de operaciones Ushuaia y con su fiesta itinerante con sede en Pacha: Vagabundos. Un tipo alegre y dicharachero que se tiñe el flequillo de un horroroso color rosa y que se junta con Lenny Kravitz para ponerse unos discos. Ese dj en el que su nombre se cuela en letra grande en el cartel de un festival Pop como es Rock In Rio Madrid. Un nuevo rey midas de la electrónica (con permiso de Richie Hawtin y Carl Cox) que acerca los sonidos, vamos a denominarlos underground, a un público más mainstream. ¿Qué le faltaba? Un himno que arrejunte todo lo anterior. ¿Lo consigue? Depende a quién le preguntes. Conmigo, en particular, no.
Y es que esa es la finalidad de Rise of Angel, aglutinar toda la esencia Luciano y por extensión su sello Cadenza en un hit, un pelotazo que sea digerible para toda la plebe. El título del disco no es baladí, la vida personal de Luciano ha estado duramente golpeada mientras su carrera profesional subía a una velocidad de vértigo. En este último año ha encontrado el equilibrio y la alegría por eso este resurgir desde su faceta como productor ya que no publicaba nada desde La Ruta del Sol en 2009. El caso es que ha intentado crear un himno demasiado cinemático y contemplativo. Sobre todo se nota la influencia ibicenca con ese sonido baleárico que envuelve todo el tema. Aunque el gancho de todo es la melodía sintetizada que suena a lo largo de los 16 minutos de duración del tema. Sí 16 minutos que dura el track y estás escuchando lo mismo todo el rato. Nunca rompe. La contundencia para bailar brilla por su ausencia (hola bombo ¿dónde estás?) y la progresión se hace tediosa. Sí, la melodía es tan simple que cualquiera puede interiorizarla y que esa pija-indie que ha descubierto las fiestas de ibiza diga "Jo tía! qué bonita y emotiva que es"; pero tras cinco minutos escuchando esos acordes del sintetizador que te rememoran a videojuegos de consolas de 16 bits hace que no sepas a ciencia cierta si estás ante el ending de Chun-Li o el de Blanka. Un himno debe hacerte sentir y moverte, aquí precisamente por querer ser taaaaan épico te cansa y aburre. Hay que saber marcar los tiempos.
Las remezclas intentan hacer unos arreglos al tema original. Mirko Loko aporta a la producción lo que le faltaba, un bombo, pero no llega a renunciar a la citada melodía lo que te sigue dejando con cara de póker porque el track sigue teniendo una duración que supera los 10 minutos.
UNER, que es más listo y sabe más de composición musical, sin renunciar a una duración excesiva (que en los últimos tiempos es marca de la casa) sí elimina esos acordes para centrarse en los sonidos baleáricos. Menos epicidad y más funcionalidad. Le da su aporte Tech-house propio y aún estando lejos de su pelotazo Pallene publicado también en Cadenza -y aún más lejos de su verdadera joya de 2012: el E.P que salió por Visionquest- el de Lleida al menos salva los muebles.
Y precisamente el corte más corto es el que se lleva el gato al agua. Andrea Oliva, un artista que no es que sea de mis predilectos, sigue la fórmula de UNER cogiendo solo lo necesario (el toque Balearic) y metiendo elementos más bailables y pisteros. Se deja de pamplinas y pone a todos a bailar de forma sencilla. No es que sea un pelotazo, pero oye es un tema que te puede sacar de un aprieto.
Dicho todo esto, no me cabe ninguna duda que el E.P, ya disponible en todos los formatos desde el lunes, triunfará en ventas y charts. Recibirá loas por mucha gente aunque a algunos pocos, a nivel artístico, no nos la cuele Luciano. Siempre quedarán sus sesiones y recopilatorios donde tiene más tino y feeling con todo tipo de público.
Luciano - Rise Of Angel - (Cadenza82) [Teaser] by Cadenza Music
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