Melodías hipnóticas como leitmotiv
Sabemos que Kompakt no es un sello que vaya a publicar cosas fáciles, o si parecen fáciles al menos son muuuy bonitas, y el nuevo disco del sueco Axel Willner bajo su aka más conocido, The Field, se ajusta a los patrones del sello de Colonia. La gris portada de Cupid´s Head es el preámbulo de lo que vamos a escuchar: seis cortes donde la melodía y los loops retorcidos son la marca de la casa, ya sean utilizados con la pista de baile como objetivo o en lugares donde lo único que se moverán serán tus neuronas.
El L.P se puso a la venta el pasado 30 de septiembre. Solo seis tracks pero salvo dos el resto duran 9 minutos como mínimo, lo que le convierte en un ejercicio de música densa y no apta para todos los públicos, en especial los temas que cierran el álbum con un ambient espeso y basado en armar temas en base a la manipulación de bucles de todo tipo, ya sean vocales o atmosféricos. Esto se acentúa en "No, No...", mientras que para cerrar se usa una atmósfera casi infinita con capas de ruido blanco, que pueden llegar a irritar a alguno, con el uso del bombo más vergonzoso que he oído en mucho tiempo. Está pero no quiere mostrarse.
Sin embargo, el resto del disco ofrece otro tipos de parajes, aunque siempre con ese calado de música preciosista que imprime Willner. "They Won´t See Me" tiene ese toque technier con una melodía que domina todo desde el comienzo del tema. Las diferentes capas que se van sumando, desde distorsiones hasta voces fantasmales amén de más melodías, dan una profundidad y progresión para que te hagas una idea de las artes The Field. En "Black Sea" el sueco se relaja y ofrece una paleta llena de claro-oscuros en el track más largo del trabajo. Momentos luminosos y otros de carácter más oscuro donde al final predomina el lado más dark. Segundo Tour de Force que se lleva con más ligereza.
El reverso de lo anterior lo encontramos en "Cupid´s Head" y en "A Guied Tour" donde tenemos el sonido más amable del productor. Sigue hipnotizando a base de la repetición y con vocales, melodías y percusión que casan a la perfección pero en vez desde la tonalidad gris oscura se va a la gris clara. Posiblemente no sea el trabajo más rompedor de este artista pero en este cuarto disco ha querido optar por un discurso más variado sin perder su identidad.
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