Recuerdo perfectamente cuando conocí la existencia de XTRNGR. Fue el año pasado en Sónar. Era primera hora y dejándome aconsejar por mi amigo Edu, natural de la Ciudad Condal, propuso ver y escuchar a un pavo de Barcelona que hace IDM. Sorpresa mayúscula lo que me encontré. Si bien es cierto que la gente que había en el césped artificial no sabía muy bien si estaban escuchando la música, se estaban relajando o luchaban por sobrevivir de la fiesta del día anterior; un servidor sí que prestó atención a lo que estaba haciendo el artista. Música escapista rica en texturas de diversa índole que te incitaban a éso, a desconectar y relajarte, ya fuera con capas luminosas o vericuetos oscuros. Así que necesitaba una confirmación del talento de este tipo, si no es suficiente crédito que haya pinchado en la Santa Trinidad de electrónica vanguardista barcelonesa (Sónar, Mutek y Mira), y ésta me ha llegado en forma de disco. El pasado lunes editó Climbing en Discontinu Records (tanto en formato físico como digital) y se te gusta el IDM en la línea british con salpicaduras teutonas y aroma mediterráneo, dale una oportunidad.
En Climbing vamos a encontrar 10 cortes con atmósferas subterráneas y también halos de luz con un uso inteligente de elementos lo-fi que dan autenticidad a la propuesta. Los breaks rompen cuando tienen que hacerlo y si no son necesarios no los utiliza. Racionalizar elementos, eso tan difícil para un productor, XTRNGR sabe perfectamente qué y cuánto necesita para armar su discurso. Esa es su virtud. A veces puede sonar como un Nathan Fake con el modo desquiciado encendido encabritado en buscar belleza en la distorsión, y otras veces a un sonido dinámico en la onda aphextwiniana. ¿Lo mejor? cuando apuesta por la calidez de la voz Miss Q para dotar de un toque orgánico a los calambrazos cerebrales con los que nos sacude este productor muy a tener en cuenta. Avisados quedáis.
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