El pasado viernes nació un nuevo sello llamado Burnin Music de la mano de Thomas Lesnier, un parisino que reside en Londres desde 2014 y que durante varios años ha estado vinculado a la escena electrónica como Dj, como booker en una agencia y como organizador de eventos. Con ese curriculum y experiencia solo le faltaba iniciar una aventura discográfica, cosa que acaba de empezar donde apuesta por editar en formatos físico y digital una música orgánica. Para ello ha recurrido al ruso Ponty Mython como encargado de desvirgar al etiqueta con un trabajo llamado Black Magic EP, siendo uno de esos trabajos con un aura especial.
Este productor de San Petesburgo afincado en la ciudad lituana de Vilna, y vinculado a su paisano Kirill Sergeev aka Kito Jempere con las fiestas Beats Delivery, es uno de los nombres a seguir este 2017 tras haber editado en sellos del prestigio de Dirt Crew y Quintessentials el pasado año y habiendo remezclado a Red Rackem, Ejeca, Octo Octa y OOFT! previamente. En Black Magic EP muestra de lo que es capaz haciendo cuatro cortes originales muy diferentes entre sí en un ejercicio de polivalencia lleno de personalidad.
La cara A es la parte "tranquila" del lanzamiento. En el track que da nombre al disco se desenvuelve en un sonido barroco, colorido, alegre y profundo lleno de mestizaje con rasgos orientales. Tiene muchísimos detalles desde la percusión hipnótica hasta el uso de cuerdas y vientos que funcionan como un reloj suizo sin desentonar ni producir ningún colapso. No le sobra ni le falta nada.
Con el segundo corte llamado paradojicamente 'God Bless Atheism' ofrece su visión del sonido Balearic con cinco ensoñadores minutos de delicadeza y finura sin recurrir en ningún momento a un bombo. Una producción suave, ambiental y muy chill que tiene escrito la palabra apertura.
La cara B es otra cosa. Aquí el terreno al que va dirigido está claro: la pista de baile. Primero con 'Street Sunbath' en el que apuesta por un sonido melódico con un bajo arrebatador y un juego de percusión muy cálido. Es de esos temas mediterráneos que podría editar Hivern Discs sin ningún problema.
La bomba llega con el cuarto tema con un exótico y housero track llamado 'Hidden Object' donde gracias a las vocales emana un espíritu africano que siempre funcionan. Del mismo modo que en la canción inicial la suma de tantos y tan variados elementos y que no se produzca estridencia alguna donde se nota la pericia, la clase, y sobre todo, las ideas muy claras de este hombre en su estudio.
Al expandir su sonido de esta manera, si me dicen que este productor es barcelonés me lo creería a pies juntillas; pero no, viene de la fría Rusia. Será cosa de magia negra.
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