El hito del productor se repite: crear un álbum de debut mostrando su sonido identificativo y más representativo, tras diversos ensayos, trabajos y proyectos que fundamentan su experiencia, desde la que parte la concepción y posterior desarrollo de su forma de entender la música que le representa. Quizás por eso, Delone, titula su primer LP con Reset All To Default, es decir: Restablecer todo por defecto. Toda su trayectoria está ahí, en su discografía, pero su primer LP representa un punto de inflexión importante en su carrera, un nuevo hito y punto de partida.
Lo edita en su sello Riverette, activo desde el año 2014 con 19 referencias publicadas donde la última es esta atractiva miscelánea sonora, emotiva en la mayoría de pasajes y ciertamente épica en sus picos más altos de intensidad. Once cortes con diferenciación de forma sonora pero que se perciben bajo un mismo estilo de autor, una obra ecléctica que bien representa un discurso trabajado y con capacidad de mostrarse diferente entre sí sin perder autenticidad. Es por eso que, con las sucesivas escuchas, Reset All To Default se percibe como un interesante muestrario sonoro que no termina de ofrecer una experiencia continuada en los más de 50
minutos que tiene de duración: ofrece sus momentos, unos más sugerentes que otros, pero individualizados entre sí.
Todo álbum debe tener su introducción y con 'Ezaro' la escucha ya se posiciona ante posibles emociones a través de la melodía y sus tonos. Y así es, basta con un par de minutos de 'Letting You Go' para conmover al oyente, una melodía delicada e irresistible, ensoñadora con una vocal que se pierde en su eco y que aporta más a la onírica. Pasados otros dos primeros minutos del siguiente corte, 'A Love Song', otra melodía vuelve a retomar la atención proponiendo algo más de épica en su tercio final apoyándose en una base más perceptible. La cierta emoción se desvanece con 'Scale': seis largos minutos de intensa melodía muy bien acompañada por la base pero que por su tono baja la emotividad y provoca un llamativo desconcierto, una ambivalencia atractiva. Los ecos regresan junto a la base más protagonista
de 'Reset', en un ejercicio con cierto groove melódico, jugando con la estridencia, la épica y el ritmo, donde seguro entra mejor una versión más extendida en directo.
'Ligeti' trastorna la escucha, rompe con lo anterior y muestra un ensayo sombrío de su autor: una pieza ambiental donde la atmósfera perturba, intimida en sus momentos álgidos y resulta un intervalo extraño para dar paso a 'Kitana', uno de los singles del álbum. Comenta Delone en una reciente entrevista que este corte tuvo el asesoramiento de Pional, ya que sus melodías estridentes no sonaban como él pretendía; bien pues el resultado es fabuloso y poderoso: épica, explosión auditiva, un torrente emotivo. Bendiciones a esa ayuda.
Mención especial para 'Vesica Piscis': verticalidad melódica, estructura rítmica atrayente, desarrollo vigoroso y un resultado potentísimo. Claramente uno de los momentos más intensos y conmovedores del disco, esa épica imaginativa desde la melodía que tanto altera las emociones del oyente. Ensayos eclécticos muy bien trabajados, con 'Amazing Grace', Delone, ofrece su forma más ambiental ejecutando una pieza brillante: cohesión total entre atmósfera, melodía y base durante los casi siete minutos, con un delicado aumento de intensidad en su segunda parte que provoca una emoción épica en la escucha; todo luminoso, ensoñador nuevamente y esplendoroso.
Misma tendencia continua en 'Zora’s Domain', aquí la base es más presente, empujando la brillante melodía que desarrolla un manto sugerente al oyente, provocando un estado alterado por la estridencia y la eclosión de la melodía, cerrando un tramo magnífico en el álbum que concluye con 'Outro', un final que ensalza melodías hipnóticas envolviendo y transportando al oyente a una dimensión tan apreciada por la comunidad que venera el sonido que explora los bordes desconocidos, a los que por
momentos les conduce Delone.
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