La rusa estrena On My Mind EP con melodías y breaks para flotar
Una de las nuevas caras que hemos descubierto este año es la rusa Maria Believskaya que como Maruwa se ha convertido prolífica dj de la escena de San Petesburgo. Su estreno como productora fue nada más y nada menos que en Steel City Dance Discs, el sello del aussie Mall Grab, donde sorprendió a propios y extraños con un EP homónimo que, a modo de presentación, nos descubría su fascinanción por los sonidos más retro noventeros en una mezcla entre house, breaks y algo de melodía ravera. Hoy mismo lanza su segundo trabajo discográfico en Lobster Theremin, otrora la punta de lanza del sonido LoFi House, y en esta ocasión continúa explotando esa mirada nostálgica al pasado añadiendo a la ecuación el trance.
Este On My Mind EP se compone de cinco cortes originales y en ellos la rusa está espléndida a la hora de aunar las influencias noventeras. Los breaks de tradición británica continúan siendo su base rítmica y percusiva sobre los que construye su discurso haciendo retrotraernos a otros tiempos. En 'On My Mind', track que abre este lanzamiento, es un cocktail molotov donde encontramos vocales y pianos a medio camino entre el house más dreamy y el trance primigénio con sus bajones atmosféricos, a lo que además le añade sonidos ácidos por si necesitabas un punto más a favor para poner los ojos en blanco y levantar las manos.
Como trance de melodía uplifting y hasta cierto punto ravero (tan en boga en la actualidad) tenemos un segundo corte llamado 'Seven Heaven' que nos retrotrae a los tiempos más PaulVanDykianos de la época del E-Werk berlinés. Pura intensidad y extasis coletivo. El pelotazo del EP.
Con el elocuente título de 'This 1 is for Ravers' se presenta un tercer corte que con el ritmo partido tiene un tratamiento bastante tranceroso en las forma de componer las armonías y sonidos además del siempre elemento ácido. Y lo que parece un 'Glue' con esteroides de repente se convierte en algo mucho más esquizo que mantienes la tensión y la presión en pista.
Un carácter más tech pero con esa sonoridad añeja impertérrita en el imaginario de Maruwa tenemos 'Electrain' una producción mucho más convencional pero igualmente hipnótica con sus sintes melódicos y el loop de vocales. Más tranceroso y onírico es 'Cloudburst' con unos pads atmosféricos y líneas ácidas sobre las que se arremolinan elementos vocales y capas sintéticas para llevarnos de viaje en un track que vuelve a demostrar la intensidad y energía de esta artista a la que habrá que seguir muy de cerca. Promesa de cara a futuro.
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